Ahora que creo que los he vaciado
me tumbo entre ellos con las piernas abiertas,
tocándome.
Sólo les pido que cumplan lo prometido.
Me revuelco y gimo.
Tal vez con hombres de verdad
hubiera funcionado.
Me voy a casa.
De camino hago una llamada.
Cuando bajo del taxi, ahí está Juan Pablo,
siempre en forma, siempre dispuesto.
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Joder tía, lo tuyo es apetito y lo demás tonterías. De los apetitos a los Andes.
ResponderEliminarInsomne de toa la vida, insomne forever jejeje
Besos
Ale ale que te de lo tuyo!!
ResponderEliminarEs que Juan Pablo siempre está por si lo necesita alguien...
ResponderEliminarPor cierto... Juan Pablo no tiene blog? porque desde tu otro blog he encontrado a uno con ese nombre... pero no se si es el susodicho... ya me pica... la curiosidad!!
ResponderEliminarJuan Pablo
ResponderEliminarsegundo,
te quiere todo el mundo!!
(de segundo plato)
CAsi!!!
ResponderEliminarEs Juan Pablo Tercero.
Pero casi no escribe. Y sólo chorradas.
Tiene cuenta en blogger porque es un cotilla...